Por Autor Conocido
El rector de la Universidad Tecnológica de Altamira, Juan Dionisio Cruz Guerrero, continuó con el festejo de su cumpleaños durante el pasado fin de semana en una reunión donde hubo muchos personajes conocidos e identificados con el Movimiento de Regeneración Nacional, sobre todo radicados en Tampico, más otros de la zona sur del estado.
Cuando la velada llegó a su cupo lleno, era el momento adecuado entre pláticas, la partida de pastel, las mañanitas y los abrazos, para que el titular de la institución educativa de nivel superior en la llamada urbe industrial diera unas palabras de agradecimiento por asistir y pasar un momento en un acto tan significativo en su vida personal.
Lo sorpresivo surgió minutos después. Sin tapujos y directo al grano, se permitió mostrar el cariño de pareja a su esposa, Úrsula Salazar Mojica, presidenta de la Junta de Gobierno en el Congreso del Estado, pero la sacudida fue en el remate de su discurso. “Aquí tienen a la próxima candidata por Morena y futura presidenta municipal de Tampico”, exclamó.
Muchas sorpresas y sin faltar los aplausos, las miradas voltearon hacia la líder de la bancada guinda en el Parlamento estatal. Hubo sonrisas de la legisladora, sin embargo, dentro de los muy apegados a la Cuarta Transformación tanto en el puerto como en Ciudad Victoria, donde mucho se decidirá en meses siguientes, era cuestión de tiempo el destape.
No es tan sencillo
Lo cierto, para la pariente del presidente Andrés Manuel López Obrador el tema de llegar a dirigir el palacio de la calle Colón no es tan sencillo. Es todo lo contrario.
Primero: afronta la lucha interna y un posicionamiento más arraigado de dos aspirantes naturales, la regidora Mónica Villarreal Anaya, hermana del gobernador, así como Olga Sosa Ruiz, secretaria de Trabajo y ya una vez abanderada.
Después de esta batalla en el interior, sin cuartel, en caso de lograr la postulación le toca uno de los más grandes retos del morenismo tamaulipeco en el 2024, arrebatarle en las urnas la “capital de las Huastecas” o “joya de la corona” al PAN, el gobernante actual y cuyo bastión está muy sólido pese a la sombra del Cabecismo y los Truquistas.
Como dato: el último líder del Poder Legislativo en llegar a un Ayuntamiento por mayoría relativa fue Gustavo Torres Salinas en 2013. Después fracasaron dos panistas: Carlos García en Matamoros y Gerardo Peña en Reynosa.
Por eso, el título planteado en este escrito.
